Cuando se trata de elegir un gel energético, una de las decisiones más comunes es si optar por una versión con cafeína o sin cafeína. Ambos tipos cumplen una función energética, pero sus efectos en el cuerpo pueden variar significativamente según el tipo de entrenamiento, horario y tolerancia personal.
Geles sin cafeína: energía limpia y constante
Los geles sin cafeína están formulados exclusivamente con carbohidratos y electrolitos, sin estimulantes. Son ideales para:
Deportistas sensibles a la cafeína.
Entrenamientos nocturnos o tarde en el día.
Sesiones largas donde no se quiere sobrecargar el sistema nervioso.
Primera parte de una carrera o entrenamiento largo.
✅ Beneficio principal: energía sostenida sin afectar el ritmo cardíaco ni provocar nerviosismo.
Geles con cafeína: energía + foco mental
La cafeína es un estimulante natural que puede mejorar la concentración, disminuir la percepción del esfuerzo y potenciar el rendimiento físico. Los geles con cafeína son recomendados para:
Competencias de alta exigencia.
Momentos de fatiga mental o física.
Fases finales de carreras (cuando necesitas ese “empujón extra”).
Deportistas que ya están adaptados al consumo de cafeína.
☕ Dato clave: la dosis ideal de cafeína en geles suele estar entre 30 y 50 mg por unidad.
¿Cuál deberías usar tú?
No hay una única respuesta, pero aquí van tres escenarios típicos:
1. Entrenamiento habitual: gel sin cafeína.
2. Competencia larga: alternar geles con y sin cafeína (usar los con cafeína al final).
3. Sesiones intensas o de intervalos: gel con cafeína para mejorar el enfoque.
💡 Consejo: probar en entrenamientos lo que usarás en competencia. Nunca experimentes algo nuevo el día de una carrera.
¿Y si quiero ambas opciones?
En Ostrich encontrarás versiones de geles con y sin cafeína, disponibles en sabores como mandarina y lima.
Conclusión
La diferencia entre un gel con y sin cafeína no es menor. Elegir el correcto según tu entrenamiento puede marcar la diferencia entre un buen día... y uno extraordinario.